viernes, 28 de mayo de 2010

¿Donde está el demandante de suelo industrial?


Leyendo la revista que envía todos los meses interempresas a Inmobiliaria Solozabal he leído un articulo redactado por el departamento industrial de Forcadell que aunque hace referencia a la zona de Barcelona y sus cinturones industriales bien lo podemos aplicar a La Rioja, concretamente a Logroño y sus polígonos periféricos.
Una zona en la que llevábamos décadas sin poder acceder a suelo industrial y ahora de repente nos encontramos con 4 nuevos polígonos que suman 4.000.000 de m2 y que están prácticamente desiertos.
*************************
En estos tiempos complejos que vivimos, echamos en falta una figura que antes era muy habitual: el ‘demandante de suelo industrial’. Un personaje prácticamente desaparecido en el mercado actual. ¿A qué es debido? ¿Cuándo volverá? Estas son las dudas que intentaremos despejar a continuación.

Los demandantes de solares industriales se pueden clasificar en dos grupos: por un lado el promotor inmobiliario, y por otro el usuario final (el industrial que quiere instalar una nave). La crisis de esta figura ha afectado a sus dos modalidades, aunque el mayor impacto para el mercado ha provenido del promotor, puesto que este absorbía un 70-80% de la demanda de suelo existente, dejando para el usuario final solo un 20-30%. Hoy día, el promotor prácticamente ha desaparecido y el usuario final ha reducido en más de un 70% sus necesidades de suelo.

¿Por qué motivos ha prácticamente desaparecido?

La crisis del promotor está causada en gran medida por la fuerte caída de la demanda de promociones industriales, derivada de la disminución de la actividad industrial y logística que ha comportado la crisis económica y el gran descenso del consumo. Por otro lado, y al margen del motivo comentado anteriormente, la reducción de demandantes en usuarios finales se puede explicar en gran parte por la crisis financiera, la cual ha supuesto una absoluta restricción del crédito por parte de las entidades bancarias y unas condiciones leoninas para concederlo. Han caído los valores de tasación y ha caído el porcentaje de financiación hasta una media del 40% del valor del suelo. Por todos es sabido que, debido a la sobreoferta existente en el mercado y al gran stock de activos inmobiliarios que se hallan en cartera de las entidades financieras, la banca es reticente a financiar nuevos proyectos hasta que no reduzca de forma considerable sus propios stocks. La suma de todos estos factores contribuye a frenar aquellos pocos proyectos que pretendían iniciarse.

Un aspecto importante a tener en cuenta en el mercado actual es la situación de los precios del suelo, los cuales han sufrido importantes descensos en el último año. Aquellos demandantes que adquirieron el solar a precios fuera de toda realidad en la etapa especulativa, calculado en base a la edificabilidad máxima (al margen de si la construcción futura iba a agotarla, o no), a día de hoy se encuentran con el activo más difícil de comercializar del mercado, básicamente por el comentado descenso de la demanda. Ni un suelo en la mejor de las ubicaciones garantiza la aparición del demandante, en cualquiera de sus dos versiones. Ante esta situación solamente queda una opción: bajar y seguir bajando los precios. En las principales zonas, como el Barcelonès o el Baix Llobregat, el descenso interanual del precio del suelo industrial gira entorno al 20-30%, y a partir de la segunda y la tercera corona se han llegado a detectar bajadas que alcanzan el 40%, y hasta el 60% en algunos casos.

De hecho, y debido a la caída de precios, están apareciendo solares industriales ciertamente muy atractivos para el promotor. El suelo ha perdido valor como materia prima con lo que el promotor podría adquirir solares a precios que permitirían proyectar promociones a un precio por debajo de la realidad actual y casi seguro más competitivo. Si además se sitúan en una buena ubicación, estos inmuebles podrían llegar a tener salida e incluso reforzar el tímido despegue que está viviendo actualmente la demanda, más activa y con capacidad de absorción en compra o alquiler o alquiler con opción de compra.

Para la reaparición del demandante, es preciso que desaparezcan las restricciones de crédito y se suavicen las condiciones de financiación actuales

¿Cuándo resurgirá?

La respuesta a esta cuestión es ciertamente muy compleja. Actualmente, el promotor se encuentra desamparado, asumiendo el 100% del riesgo puesto que no cuenta con financiación previa, ni del banco ni de ventas sobre plano realizadas antes de finalizar la obra, provocando que encuentre mejores rentabilidades en otros mercados.

Para su reaparición a medio plazo, es preciso que desaparezcan las restricciones de crédito y se suavicen las condiciones de financiación actuales. Estos aspectos deberían ir acompañados por una recuperación económica general, animada por un aumento del consumo, el cual provocaría una subida de la actividad industrial y logística. Superada la crisis de confianza, se empezaría a estimular nuevamente el mercado de solares, con el consiguiente retorno de la figura del demandante de suelo, en cualquiera de sus dos versiones.

*********************************

No hay comentarios:

Publicar un comentario